Hay, en mi
cama, un millón
de poemas que no se han escrito.
Todos, sin duda, hablan de ti.
Aún cuando ya no estés aquí,
aún cuando otra piel haya habitado
en este mar lleno de versos.
Miles de historias que, inevitablemente,
me guían hacia tu recuerdo.
Como una imagen desfigurada
soslayo, tu figura, en cada almohada,
de poemas que no se han escrito.
Todos, sin duda, hablan de ti.
Aún cuando ya no estés aquí,
aún cuando otra piel haya habitado
en este mar lleno de versos.
Miles de historias que, inevitablemente,
me guían hacia tu recuerdo.
Como una imagen desfigurada
soslayo, tu figura, en cada almohada,
mas tus
manos, impregnadas en las
sábanas, son
imposibles de evitar.